He llegado hasta aquí porque nunca me canso de decir cosas. Primero me hice un Fotolog, pero no lo leen ni los bots que me dejan SPAM. Después descubrí Twitter y aunque estoy como
Así que aquí estoy, hablando con la pared cibernética pero quedándome más a gusto que en brazos. Si alguien llega a leer esto me daré con un canto en los dientes, siempre en sentido figurado.
Antes de darle por primera vez a este botoncito naranja-butanero tan feo de 'publicar entrada' quiero darle las gracias a Zippy, porque se ha currado el banner que preside este blog; a Bely, porque el dibujo original es suyo (¡salá!) y a Barbijaputa, porque su blog fue el que me introdujo hace muuuucho tiempo en estos mundos.
Allá voy, botoncito horrendo.